Atenas y Creta. Septiembre 2008
Viajar en bici es de lo mejorcito que se ha inventado. Es una sensación inmensa de libertad, viendo mundo y disfrutando de cada pedalada. Y una vez más cargué las alforjas y junto a María nos fuimos a ciclar unos días.
Parece mentira lo rápido que se han pasado estos 20 días por tierras helénicas. Fuimos hacia Grecia buscando ciclar una de las islas más montañosas del Mediterráneo, la isla de Creta. Pero antes hicimos escala en Atenas al llegar y al marchar. De Atenas a Creta y viceversa,fuimos en ferry, aprovechando el viaje nocturno,para dormir con nuestros sacos en una esquinilla de la recepción.
En Atenas vimos la Acrópolis,paseamos por el barrio de Plaka,el Olimpo de Zeus, el jardín nacional, el cambio de guardia, las casas presidenciales de los manda más, y gente por todos los sitios, había mucha gente en esa city, así que nos fuimos en busca de tranquilidad a Creta. Las ciudades por norma general no nos gustan a los globeros amantes del aire libre.
Creta tiene una forma alargada, de 265 kms de largo, y entre 50 y 80 kms de ancho.
En el interior de la isla se esconden montañas imponentes, con picos que rozan los 2500 metros. Esta orografía nos hizo ponernos las pilas, ya que la intención era ciclar todo el perímetro de la isla, pero para ello habría que entrar de vez en cuando hacia el interior. Estas incursiones fueron agotadoras y muy pero que muy duras. Subidas interminables con mucho desnivel, bajo un sol achicharrador de 35 a 40grados, incluso a veces superando los 40 grados.
Eolo tambien nos lo puso complicado, lanzando ráfagas que incluso nos tumbo alguna vez. A María le tiro un par de veces al suelo, y a mi una vez me lanzo contra unos zarzales de una cuneta. Todo esto hizo que para los 2 fuese el viaje más duro en bici, y eso que algún viaje llevamos realizado....
Los escasos 800kms no sirven como referencia, ya que hubo días que para recorrer 40kms hubo que pedalear mucho,pero que mucho.....
La recompensa a tanta dureza fue ir encontrando paisajes pelados por el viento, que engrandecían aún más esas grandes montañas que hay en Creta. También hubo muchos campos de olivos que se amontonaban a lo largo de infinidad de kms.
Entre pedalada y pedalada fuimos llegando a playas encantadoras donde nos dimos unos cuantos baños, y pueblecitos donde me hubiese pasado una semana entera, pero no se podía parar ,había q seguir descubriendo lugares.....Hubo playas con palmeras,otras de arena blanca,otras de rocas, alguna casi inaccesible, pero todas muy bonitas. Cada día caían 3 o 4 playitas con sus respectivos baños. La playa también fue el sitio donde vimos amaneer unos cuantos días.
Dormimos unos cuantos días en playitas donde dábamos la bienvenida a otro grán día. Y aunque cargamos con una tienda de campaña de 4 kilazos, no hizo mucha falta plantarla, ya que por menos de 30 euros también se podía encontrar alojamiento en casas particulares. El camping nos salía por 20 euros, y siempre se duerme mejor en una camita. El descanso es muy importante en estos viajes.
Lo peor del viaje fue el miedo que pasamos por la carretera nacional que obligados tuvimos que coger algún tramo. Conducen de una forma muy agresiva, utilizando los arcenes por entero, con el peligro que conlleva para la integridad de los ciclistas. Apenas nos encontramos con una decena de personas en bici, y es que hay que echarle valor para ciclar por aquellos lares....
Los 3 últimos días tuve que pedalear a piñón fijo, ya que la rueda trasera se bloqueo, y no me permitía avanzar sin pedalear. Eso me hizo mantenerme muy concentrado ya que no podía descansar ni una pedalada. En fin la cosa era llegar y se llego...
Un viaje muy bonito,donde disfrute de unos sitios muy bellos con una gran compañía. Kali spera !!
Parece mentira lo rápido que se han pasado estos 20 días por tierras helénicas. Fuimos hacia Grecia buscando ciclar una de las islas más montañosas del Mediterráneo, la isla de Creta. Pero antes hicimos escala en Atenas al llegar y al marchar. De Atenas a Creta y viceversa,fuimos en ferry, aprovechando el viaje nocturno,para dormir con nuestros sacos en una esquinilla de la recepción.
En Atenas vimos la Acrópolis,paseamos por el barrio de Plaka,el Olimpo de Zeus, el jardín nacional, el cambio de guardia, las casas presidenciales de los manda más, y gente por todos los sitios, había mucha gente en esa city, así que nos fuimos en busca de tranquilidad a Creta. Las ciudades por norma general no nos gustan a los globeros amantes del aire libre.
Creta tiene una forma alargada, de 265 kms de largo, y entre 50 y 80 kms de ancho.
En el interior de la isla se esconden montañas imponentes, con picos que rozan los 2500 metros. Esta orografía nos hizo ponernos las pilas, ya que la intención era ciclar todo el perímetro de la isla, pero para ello habría que entrar de vez en cuando hacia el interior. Estas incursiones fueron agotadoras y muy pero que muy duras. Subidas interminables con mucho desnivel, bajo un sol achicharrador de 35 a 40grados, incluso a veces superando los 40 grados.
Eolo tambien nos lo puso complicado, lanzando ráfagas que incluso nos tumbo alguna vez. A María le tiro un par de veces al suelo, y a mi una vez me lanzo contra unos zarzales de una cuneta. Todo esto hizo que para los 2 fuese el viaje más duro en bici, y eso que algún viaje llevamos realizado....
Los escasos 800kms no sirven como referencia, ya que hubo días que para recorrer 40kms hubo que pedalear mucho,pero que mucho.....
La recompensa a tanta dureza fue ir encontrando paisajes pelados por el viento, que engrandecían aún más esas grandes montañas que hay en Creta. También hubo muchos campos de olivos que se amontonaban a lo largo de infinidad de kms.
Entre pedalada y pedalada fuimos llegando a playas encantadoras donde nos dimos unos cuantos baños, y pueblecitos donde me hubiese pasado una semana entera, pero no se podía parar ,había q seguir descubriendo lugares.....Hubo playas con palmeras,otras de arena blanca,otras de rocas, alguna casi inaccesible, pero todas muy bonitas. Cada día caían 3 o 4 playitas con sus respectivos baños. La playa también fue el sitio donde vimos amaneer unos cuantos días.
Dormimos unos cuantos días en playitas donde dábamos la bienvenida a otro grán día. Y aunque cargamos con una tienda de campaña de 4 kilazos, no hizo mucha falta plantarla, ya que por menos de 30 euros también se podía encontrar alojamiento en casas particulares. El camping nos salía por 20 euros, y siempre se duerme mejor en una camita. El descanso es muy importante en estos viajes.
Lo peor del viaje fue el miedo que pasamos por la carretera nacional que obligados tuvimos que coger algún tramo. Conducen de una forma muy agresiva, utilizando los arcenes por entero, con el peligro que conlleva para la integridad de los ciclistas. Apenas nos encontramos con una decena de personas en bici, y es que hay que echarle valor para ciclar por aquellos lares....
Los 3 últimos días tuve que pedalear a piñón fijo, ya que la rueda trasera se bloqueo, y no me permitía avanzar sin pedalear. Eso me hizo mantenerme muy concentrado ya que no podía descansar ni una pedalada. En fin la cosa era llegar y se llego...
Un viaje muy bonito,donde disfrute de unos sitios muy bellos con una gran compañía. Kali spera !!
1 comentario:
uff preciosos lugares los de las fotos, pero tiene pinta de hacer mucha caló
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